lunes, 17 de agosto de 2009

Proyecto realizado y sistematizado por:
Darling Jaramillo
Tomado del libro “Proyectos con-sentidos”. No. 3 de la serie “Maestros escribiendo” del programa de Mejoramiento docente de la Universidad del Valle, Cali 1999. El proyecto se llevó a cabo con niños de Transición, de 5 a 6 años, del Instituto Técnico Industrial Comuna Diecisiete de la ciudad de Cali, en el año escolar 1997-1998



Los Tres Cerditos: Un Ejemplo de Pedagogía por Proyectos



Contexto
Me planteé este proyecto en dos momentos claves: El primero correspondió a la elección del cuento y a mi ubicación como lectora de éste. Para hacer la elección del cuento, leí varias versiones de “La Historia de los Tres Cerditos” y escogí la versión que corresponde a la traducción realizada por Laura Sampson de English Fairy Tales, New York, 1967, reedición de la impresión original de 1696, porque consideré fundamental el valor literario del texto y su riqueza lingüística. Como explico a continuación, en este primer momento propuse a los alumnos la lectura de un cuento no solamente para el disfrute del lenguaje, sino con una intencionalidad pedagógica que considero le ofrece a los niños múltiples posibilidades de un aprendizaje significativo del lenguaje escrito y del sistema de escritura. ¿Por qué trabajar con cuentos? Cada año escolar propongo a los niños la lectura intencional de un cuento, ya que como maestra considero que este tipo de texto ofrece a los niños múltiples ganancias, tanto a nivel psicológico como cognitivo en el aprendizaje del lenguaje escrito y del sistema de escritura. A nivel psicológico les permite vencer sus temores, sus miedos, sus angustias y recrear sus fantasías, sus sueños, sus deseos a través de las acciones e intenciones de los personajes. Así mismo, el trabajo con los cuentos, cuya estructura narrativa es cercana a los niños, les posibilita explicarse y dar explicaciones sobre sus experiencias subjetivas y por lo tanto organizar su pensamiento, a la vez que les permite aprender sobre el lenguaje escrito y el sistema de escritura.

Como maestra me propuse los siguientes objetivos:

• Realizar una lectura interpretativa del texto “La Historia de Los Tres Cerditos”.

• Elaborar el análisis del texto para posteriormente proponer estrategias de lectura a los niños.
• Avanzar en mi proceso de aprendizaje del texto narrativo como propuesta de enseñanza en los primeros grados.

Para los niños como lectores:
• Propiciar la interacción con el texto “La Historia de Los Tres Cerditos” para favorecer el desarrollo de sus competencias lectora y escritora.
• Establecer una relación intencional con el texto narrativo, su organización y su estructura.
• Construir, en la interacción con el texto, significados individuales y colectivos acerca del lenguaje escrito y del sistema de escritura.
• Utilizar el texto narrativo como elemento de reflexión sobre el propio pensamiento y de organización y reorganización de sus distintos saberes.

ESTRATEGIAS DE ACCIÓN Y DESARROLLO DEL PROYECTO

Leí el texto a los niños en varias sesiones:

Primera sesión: Informé a los niños que iba a leerles el título de un cuento muy conocido por ellos “La Historia de Los Tres Cerditos”, a continuación y para que anticiparan el contenido del texto les pregunté: -¿De qué creen ustedes que se trata este cuento? Los niños respondieron: - De tres cerditos que hicieron tres casitas y del lobo malo que quería comérselos y ellos se escondieron en la casa del hermano que hizo la casa de ladrillos.

- ¿Qué otros personajes piensan ustedes que hay en el cuento? La mayoría de los niños responden:
El lobo y los cerditos. Otros niños dicen los nombres de otros personajes y los que no están de acuerdo los corrigen. Les propuse leer el texto para saber si esos eran los personajes, si nos faltaban o nos sobraban algunos. A medida que iba haciendo la lectura, interrumpía para pedir a los niños que hicieran sus propias predicciones, las cuales confrontábamos con el texto fuente. Además, cuando leía y encontrábamos el nombre de un personaje, lo escribía en el tablero. En estas anticipaciones de lo que pensaban sobre el contenido del cuento, los alumnos pusieron en juego sus conocimientos previos de lecturas de otros cuentos y el conocimiento que poseían de éste en particular; es decir se ubicaron como lectores activos del texto. Además, estaban aprendiendo que todos los cuentos tienen un título y que a partir de éste podíamos encontrar algunas pistas del contenido de la historia.

Segunda sesión: Realicé una segunda lectura del cuento para que los niños tuvieran una visión global de la historia. Esta vez leí sin interrupciones y cada niño seguía la lectura en la fotocopia sin ilustraciones que les había entregado previamente. Ellos iban señalando con el dedo donde pensaban que estaba escrito lo que yo iba leyendo. Como lo que pretendía era trabajar el sentido y la comprensión, el ir señalando en el texto escrito a medida que se lee le permite a los niños diferenciar la lengua escrita de la oral, aprender que lo escrito tiene un significado, que las palabras escritas en el papel tienen sonidos, por esto las ilustraciones en el texto en este momento de la lectura no eran importantes, como si lo serían en otra tarea posterior.

Tercera sesión: La tercera lectura del cuento la realicé detenidamente por párrafos, durante ésta los niños intervinieron continuamente y algunos no aceptaban lo que decía el texto, ya que reñía con las versiones que ellos tenían del mismo. Al leer donde dice: “así que soplé y resopló, echó a volar la casa y se comió al cerdito”, los niños interrumpen y dicen que así no es el cuento. Algunas de sus afirmaciones son: - Niño 1: “Eso no es verdad, el lobo no se come al cerdito” - Niño 2: “No, el cerdito se esconde en la casa del hermano” Al continuar la lectura, en la parte en la que el lobo se come al segundo cerdito, los niños protestan enojados y dicen: - Niño 1: “Ese no es el cuento que yo sé”. - Niño 2: “Eso no es así, está equivocado”. - Niño 3: “Los dos cerditos se esconden en la casa de su hermano”.

Cuarta sesión: Para reconstruir la historia presenté a los alumnos las ilustraciones fotocopiadas y ampliadas de los momentos claves del cuento para que las colorearan, después las organizamos teniendo en cuenta la secuencia y las pegamos en hojas grandes siguiendo el orden. Durante la reconstrucción tanto de las imágenes tanto como del texto escrito los niños tuvieron que reflexionar sobre los diferentes sucesos del cuento tratando de darle un ordenamiento temporal y espacial, recordando lo que iba primero y lo que segia después; en esta tarea cada uno de los alumnos explicitó la representación interna del cuento que había logrado construir.
Quinta sesión: Leí a los niños la renarración colectiva del texto, párrafo por párrafo, para confrontarla con el texto fuente y saber cuáles elementos habían tenido en cuenta y cuáles no. Durante esta confrontación del texto colectivo y el texto fuente construimos la segunda renarración más elaborada y organizada con elementos más cercanos al texto. La renarración como dice Lesley Morrow (1989) “Es un procedimiento activo que supone la participación de los niños en la reconstrucción del texto y promueve la interacción entre adultos y niños. Promueve también la integración y texto se interrelacionan y cómo el texto se entreteje con las propias experiencias”. Esta segunda renarración fue escrita también en hojas grandes reemplazando a la primera.


Sexta y séptima sesión : Retomé la segunda renarración colectiva que estaba escrita en las hojas grandes para identificar los nombres de los personajes. Inicié buscando con ellos dónde decía “cerdito”: - ¿Cómo saben que aquí dice cerdito? - Niños: Porque está al principio con el título. - ¿Cómo saben que ese es el título? - Niños: Porque en todos los cuentos el nombre está siempre arriba. ¿Por qué no buscamos en otras partes del texto la palabra cerdito? Preguntar a los niños dónde y por qué creen que allí dice “cerdito”’casa”, “lobo” les posibilita explicitar sus hipótesis sobre el sistema de escritura. Por ejemplo, hipótesis como “Allí dice cerdito porque tiene una de mi nombre”, “Porque comienza por la de Cali”, “Porque es igual a la del título” me ayudan a determinar en qué momento de su proceso están y a plantearles estrategias que les permitan seguir avanzando, sin necesidad de recurrir a los ejercicios visomotrices tradicionales que buscan solamente que los niños reconozcan y memoricen letras y palabras. Pedí a los niños que sacaran el texto individual que tenían del cuento para volver a leer e identificar el nombre de cada uno de los personajes.


A medida que se hacía la lectura, se subrayaba con un color previamente acordado el nombre de cada personaje que iba apareciendo. Lo hicimos primero con el texto colectivo y después con el texto individual. Volví a leer el cuento y a medida que lo hacía, construí con los niños en el tablero un mapa del recorrido ubicando los diferentes lugares por donde transcurre la historia y los desplazamientos que realizan los personajes. Este mapa lo hice en una hoja y luego lo entregué fotocopiado a cada niño, en él iban subrayando con diferentes colores los desplazamientos de los personajes. Esta actividad les permitió a los niños ubicarse simultáneamente en el tiempo y en el espacio de la historia, además la elaboración del mapa les permite a los niños organizar la trama del cuento, aprender a controlar su propia comprensión y le sirve de modelo para desarrollar la comprensión de otros cuentos.


Octava y Novena sesión: Presenté a los niños la versión del cuento en casete para escucharla y en la novena sesión presenté a los niños la película del cuento; ambas versiones sirvieron para buscar las similitudes y diferencias con el texto fuente; además los niños pusieron en juego nuevamente la elaboración que había logrado construir del texto.

MOSTRANDO NUESTRO TRABAJO

Mi interés en la décima sesión del proyecto fue lograr la participación de los padres; para ello hice una reunión donde les expliqué el proceso de lectura realizado con los niños, los objetivos que me había propuesto y las diferentes estrategias realizadas. Además les expliqué en qué consiste una renarración, cuál es el sentido pedagógico que tiene para los niños y el trabajo que ellos debían realizar con sus hijos. Su papel sería escribir la renarración hecha por los niños, sin intervenir para completarla o quitarle elementos, es decir, que conservaran la fidelidad de las palabras y la secuencia de la renarración de cada niño. Para esta tarea la consigna que di a los niños fue la siguiente: “Cuenta a tus padres la historia de los tres cerditos como si tu fueras el narrador”. Las renarraciones que escribieron los padres fueron leídas en el salón para confrontarlas con el texto fuente. Con esta actividad evalué diferentes aspectos del proceso de lectura de los niños:

• Si al narrar dicen el título.


• Si utilizan una fórmula para iniciar el cuento.


• Si hay diferenciación entre los personajes, sus acciones y la secuencialidad de los eventos en el tiempo y en el espacio.


• Si cierran el cuento.


• El nivel de memorización, organización y comprensión del texto.